Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 ISSN: 1132-1660 Análisis de microfacies de los montículos de la Formación Cosgaya. Sección de Las Ilces, Pensilvánico, Cantabria Microfacies analysis of the Cosgaya Formation mounds. Las Ilces Section, Pennsylvanian, Cantabria, N Spain Ismael Coronado & Sergio Rodríguez CORONADO, I. & RODRÍGUEZ, S. 2009. Análisis de microfacies de los montículos de la Formación Cosgaya. Sección de Las Ilces, Pensilvánico, Cantabria. Coloquios de Palaeontología, 59: 61-91. Resumen: El Grupo Potes (Pensilvánico, Valle de Liébana, Cantabria) está formado por una sucesión rítmica de piza- rras y areniscas entre las que se intercala la Fm Cosgaya, constituida fundamentalmente por calizas. Estas calizas pre- sentan un abundante contenido de algas y corales que en algunos puntos forman bioconstrucciones. Estas bioconstruc- ciones son especialmente notables en la sección de Las Ilces, donde se han identificado siete microfacies diferentes: MF-1, Wackestone bioclástico con pequeñas masas de Donezella estabilizantes; MF-2, Boundstone de organismos esta- bilizadores y soportantes; MF-3, Boundstone/Packstone de intraclastos y peloides; MF-4, Wackestone/Packstone bio- clástico; MF-5, Boundstone/Packstone de Donezella, MF-6, Packstone peloidal bioclástico; MF-7, Mudstone/wackes- tone de calcisferas y ostrácodos. Estas microfacies corresponden a las distintas zonas de montículos formados por comunidades microbianas, algas y corales y a las áreas próximas a los mismos. Palabras clave: Pensilvánico, Cantabria, Microfacies, Montículos, Corales, Algas, Foraminíferos. Abstract: The Potes Group (Pennsylvanian, Liébana Valley, Cantabria N Spain) is composed of a rhythmic succession of shales and sandstones and contain the Cosgaya Formation. The Cosgaya Formation is composed of organic lime- stones that show abundant algae and corals and locally form mounds. Those mounds are conspicuous at Las Ilces Section where seven microfacies have been identified: MF-1, Bioclastic wackestone with Donezella stabilizing patch- es; MF-2, Boundstone of stabilizing and supporting organisms; MF-3, Boundstone/Packstone of intraclasts and peloids; MF-4, Bioclastic Wackestone/Packstone; MF-5, Donezella Boundstone/Packstone; MF-6, Bioclastic and peloidal Packstone; MF-7, Mudstone/wackestone with calcisferas and ostracods. These microfacies correspond to diferent parts (or zones) of mounds formed by microbial communities, algae and corals and the close areas of them Key words: Pennsylvanian, Cantabrian, Microfacies, Mounds, Corals, Algae, Foraminifers. Departamento y UEI de Paleontología, Facultad de Ciencias Geológicas e Instituto de Geología Económica. UCM- CSIC. C/ José Antonio Novais 2, 28040 Madrid. España. ismael.coronado@geo.ucm.es, sergrodr@geo.ucm.es 61 INTRODUCCIÓN El presente trabajo tiene como objetivo estudiar las distintas microfacies de la sección de Las Ilces a partir del análisis de los compo- nentes identificados, así como de las fábricas y texturas deposicionales. La sección se ha realizado en un aflora- miento de calizas negras, masivas y con carác- ter bioconstruido, que aparentemente presen- tan una morfología dómica-lenticular y están asociadas a un conjunto de tramos bien estra- tificados. El afloramiento se ubica en el km 17,8 de la N-621 (Carretera de Potes a Fuente De), al este del municipio de Las Ilces, siendo sus coordenadas geográficas (Fig.1A y 1B) 4775035- 356783, a una cota de 744 m (Fig.1C y 1D). Estos materiales se encuentran en la comunidad autónoma de Cantabria, den- tro del municipio de Camaleño, perteneciente al Valle de Liébana, y más concretamente en la localidad de Las Ilces. Esta sección se incluye en la Hoja 81, Potes, del Mapa Topográfico Nacional a escala 1:50000. Los materiales de estudio pertenecen a la Fm Cosgaya, que fue descrita por primera vez por MAAS (1974) designándola como Caliza de Cosgaya y que analizó en detalle la suce- sión del Carbonífero Superior de más de 10 km de potencia en la región de Nansa – Deva, definiendo para estos materiales una secuencia de flysch, que denominó “Wildfilch”. Diferenció en esta región dos unidades; la uni- dad de Picos de Europa (donde incluye la Caliza de Montaña, la Fm Picos de Europa, la Fm Áliva y la Fm Lebeña), y la unidad del Valle de Liébana y sus áreas asociadas (que incluyen la Caliza de Cosgaya, la Fm Cervera, las formaciones Curavacas, Lechada y Vañes, la Fm Pandetrave, Sierra Corisa, Valdeón, la Unidad de San Mamés, la Fm Barruelo y la Unidad Cordel). Atribuye la unidad de la Caliza de Cosgaya al Pensilvánico y más con- cretamente al Bashkiriense superior. MARTÍNEZ GARCÍA (1981) publica una compilación del Paleozoico de la Zona Cantábrica Oriental en el que se incluye la Fm Cosgaya denominándola, por primera vez, como unidad formal, apoyándose en los datos de MAAS (1974) y la síntesis realizada por él para la edición del Mapa Geológico Nacional Coronado & Rodríguez Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 ISSN: 1132-166062 Figura 1.- Situación geográfica de la sección de Las Ilces. A.- Situación de Cantabria dentro de la Península Ibérica, la región señalizada pertenece al municipio de Camaleño. B.- Situación de Las Ilces. C.- Mapa geológico de la región de Nansa-Deva. Modificado de MAAS (1972). D.- Situación geográfica del afloramiento, la estrella blanca indica su posi- ción exacta. Figure 1.- Geographic location of the Las Ilces Section. A.- Map of Cantabria; the shaded area belongs to the Camaleño village. B.- Location of Las Ilces. C.- Geological map of the Nansa-Deva region. Modified from MAAS (1972). D.- Location of the outcrops (white star). Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces de la Hoja 81 (Potes). SÁNCHEZ DE LA TORRE et al. (1983) publi- can la evolución sedimentaria del Carbonífero Superior en la zona de Liébana donde sinteti- zan las principales unidades y su evolución sedimentaria, incluyendo la Fm Cosgaya den- tro del Grupo Cosgaya-Ledantes. RODRÍGUEZ (1984) realiza un análisis siste- mático y paleocológico de la asociación de corales de la Fm Cosgaya. En este estudio recoge material tanto en el valle del río Cubo, como en la localidad de Las Ilces, levantando dos columnas sintéticas en la zona y datando la formación como perteneciente al Serpujoviense superior. Por último, RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al. (1992) publican la Hoja 81 (Potes) escala 1:50000 y cartografían los afloramientos de la sección de Las Ilces como conglomerados per- tenecientes a la unidad de Conglomerados de Curavacas, atribuyendole la misma edad que MAAS (op. cit) a la Fm Cosgaya. ESTRATIGRAFÍA En el Valle de Liébana, el Grupo Potes comprende un registro sedimentario desde el Namuriense al Westfaliense A. Está constitui- do por una alternancia, a veces rítmica, de are- niscas y lutitas más o menos masivas, con un contenido subordinado de calizas, brechas cal- cáreas y conglomerados polimícticos. Las condiciones de afloramiento no permiten conocer su potencia total, estimándose en unos 2000 m (MAAS, 1974). En la Fig. 2 se expone una correlación de RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al. (1994) entre tres columnas representativas de los materiales que forman el grupo en el Valle de Liébana. La mayor parte de la sucesión está formada por alternancia de “Grauwackas-pelitas” con adelgazamientos y cambios litológicos latera- les importantes con frecuentes intercalaciones de carbonatos depositados a partir de transpor- tes en masa (olistostromas). MAAS (1974) interpreta que la sucesión ha sido originada por corrientes de turbidez exceptuando los miembros carbonáticos. En el núcleo del anticlinal de Cosgaya aflo- ra un conjunto de calizas perteneciente a la “Fm Cosgaya” (Fig. 1C). Formación Cosgaya. Presenta un espesor de 250 m (RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al., 1994) y los materiales forman una secuencia de cali- zas margosas de color gris oscuro, en ocasio- nes amarillentas por la meteorización, que alternan con pizarras negras (MAAS, 1974) y margas (RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al., 1994). Las capas de caliza presentan un espesor variable, y en corte fresco manifiestan un característico olor fétido. Hacia el techo domi- nan las pizarras y las capas de caliza comien- zan a aumentar su espesor, hasta alcanzar 10 m de espesor medio y muestran una forma más lenticular. Las pizarras de esta parte superior no son puras ya que contienen finas laminacio- nes de areniscas de 2 mm de espesor, las cua- les normalmente muestran una granoselección positiva y una base neta. También se pueden encontrar capas y cuerpos lenticulares de limolitas concrecionales. Hacia el techo de las calizas se observan cantos de cuarcita aislados y bien redondea- dos. La sucesión pasa de forma abrupta a una secuencia de conglomerados (enteramente cuarcíticos en el Sur del flanco anticlinal y con lentejones de calciruditas en el flanco Norte del anticlinal) y potentes capas de areniscas, pertenecientes al Mb Cubo de la Fm Cervera. El contacto es probablemente una paraconfor- midad, sin embargo no se han encontrado evi- dencias concluyentes (MAAS, 1974). En las proximidades de la localidad de Las Ilces se ha levantado una sección estratigráfi- ca en la carretera N-621, siendo sus coordena- das geográficas N40º 6´ 48,1´´ y W4º 45´ 44,3´´ (Fig. 3). En la parte inferior de la sección se distin- gue un primer conjunto estratigráfico, Tramo M, que presenta unas calizas negras masivas que muestran una forma dómica – lenticular, de 32 m de ancho a lo largo de la carretera, y unos 10 m de alto. Se distinguen tres episodios de crecimiento, representados en paquetes, el primer paquete (M1) tendría una altura aproxi- mada de 7,2 m, el segundo (M2) aproximada- mente 1,8 m y un tercero (M3) de un metro (Fig. 4). Hacia el núcleo de la forma se observan colonias de corales fasciculados que abundan en toda su extensión. Estas colonias fascicula- das de corales rugosos, bastante grandes, pre- sentan dos tamaños diferenciables; unos que varían entre 8 y 10 mm y otros entre 15 y 20 mm y aparecen de forma dispersa, observán- dose entre ellos algunos corales aislados. Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces ISSN: 1132-1660 63 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-166064 siguientes: Tramo 1 (T1): 2,66 m de calizas negras bien estratificadas, estratodecrecientes, pasan- do de un 1m en la base a 0,3 m hacia el techo, se observan niveles margosos interestratifica- dos. Son más bioclásticas que el paquete masi- vo, sobre todo a techo. Tramo 2 (T2): 1,75 m de calizas negras bien estratificadas con bancos que presentan a base un espesor de 0,8 m y tienen un carácter estratodecreciente hacia el techo, llegando a 0,40 m de espesor. Tramo 3 (T3): 4,02 m de calizas negras bien estratificadas, estratocrecientes, con un espesor de 0,3 m en la base y 1 m hacia el techo del tramo. Estos niveles no presentan superficies de estratificación paralelas mos- trando una morfología más irregular y contie- nen cantos blandos. Tramo 4 (T4): 2,05 m de calizas negras, RODRÍGUEZ (1984) los atribuye a los géneros Caninostrotion (las formas grandes) y Nemistium (las formas pequeñas). Hay presen- cia de Syringopóridos en todo el conjunto, pero son más abundantes en la base de la estructura (Fig. 5). Hacia el SW se observan masas de algas, y las facies más externas presentan característi- cas más margosas y bioclásticas (wackestone) con algunos restos recristalizados de braquió- podos. En la base de la zona central del primer paquete hay presencia de chaetétidos y gaste- rópodos. Sobre estas calizas masivas se distingue una sucesión de tramos bien estratificados por debajo de una segunda zona masiva. A estos tramos se les ha denominado T1, T2, T3, T4 y T5 y a las calizas masivas superiores, Tramo T6. Las características generales son las Figura 2.- Columnas sintéticas del Grupo Potes. En las columnas se representan las facies más características: A) Lutitas y limolitas con canales bioclásticos. B) Areniscas, limolitas y lutitas con bancos potentes de areniscas y conglomera- dos. C) Olistotromos. D) Conglomerados y areniscas masivas. E) Secuencias rítmicas lutítico-arenosas y F) Calizas (tomado de RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al., 1994). Figure 2.- Synthetic logs of the Potes Group. Only most typical facies are included: A) Shales with bioclastic chanels. B) Sandstones and shales with thick beds of conglomerates and sandstones. C) Olistostromes. D) Massive conglomer- ates and sandstones. E) Rhythmic successions with shales and sandstones. F) Limestones (From RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ et al., 1994). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez masivas, distribuidas en dos bancos de aproxi- madamente 1 m de espesor. Se encuentran separadas del Tramo 3 por una superficie irre- gular bioturbada. Estos bancos peor estratifi- cados presentan más componentes visibles, como syringopóridos, chaetétidos, gasterópo- dos y algún coral rugoso. Tramo 5 (T5): 5,90 m de calizas bien estra- tificadas, más finas que los tramos anteriores, presentan niveles de 0,30 a 0,50 m de espesor. Se observa un carácter general estratocrecien- te para todo el tramo, superando hacia el techo el 1 m de espesor y haciéndose más masivo, lo que dificulta la diferenciación entre la base de T6 y el techo de T5. Algunos niveles presentan superficies de bioturbación hacia el techo y en algún nivel se pueden observar foraminíferos. Tramo 6 (T6): Calizas negras masivas con ISSN: 1132-1660 65 Figura. 3.- Columna estratigráfica de Las Ilces. Marcados con flechas los puntos de muestreo. Figure 3.- Stratigraphical log of the Las Ilces Section. Samples location marked by arrows. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez gran variedad de componentes; distintos géne- ros de corales rugosos, syringopóridos, porífe- ros indeterminados, chaetétidos y distintos tipos de algas como bioconstructores prima- rios. Parecen reproducir una agrupación repe- titiva de componentes: por un lado, syringopó- ridos, chaetétidos y corales rugosos; y por otro lado, algas tubulares, algas con aspecto den- drítico y poríferos. Esta repetición no es regu- lar, sino que ambas agrupaciones se disponen de forma irregular tanto en la vertical como en la horizontal, llegándose a encontrar asocia- dos, en ocasiones, los corales rugosos con las algas, sobre todo hacia techo. Se ha realizado un muestreo aleatorio en el Tramo M, (Fig. 6) condicionado por la accesi- bilidad del afloramiento, ya que en algunos puntos del mismo hay colocada una malla de protección. El muestreo de los tramos tableados se rea- lizó seleccionando muestras en los niveles más representativos, tanto en la base como en el techo de cada nivel y en aquellos tramos que presentan un espesor importante se muestrea- ron a intervalos regulares en la vertical. El muestreo de estos tramos se indica con preci- sión en la columna estratigráfica (Fig. 3). Por último se realizó un muestreo aleatorio en el Tramo 6 ya que la calidad del aflora- miento era muy pobre, encontrándose parcial- mente cubierto por un canchal de su propio desmantelamiento. RESULTADOS Se ha realizado el análisis de microfacies de 68 láminas delgadas de las muestras toma- das de la sección de Las Ilces. Para dicho aná- lisis se ha atendido a los diferentes tipos de componentes, texturas y fábricas deposiciona- les, contenido paleontológico y elementos dia- genéticos característicos. COMPONENTES Componentes esqueléticos Los restos fósiles más abundantes que con- forman la fracción esquelética de las muestras son: algas calcáreas, cnidarios, foraminíferos bentónicos, gasterópodos ornamentados, bivalvos, cefalópodos, ostrácodos, equinoder- ISSN: 1132-166066 Figura 4.- Panorámica de la sección de Las Ilces. Las líneas discontinuas separan los principales conjuntos estratigrá- ficos. Tramo M, M1, M2 y M3 corresponde a los distintos paquetes que sobrecrecen la estructura. Los niveles bien estratificados (T1 a T5) se extienden hacia el N-NW. El Tramo T6 bioconstruido crece sobre los niveles estratificados. Altura de la persona de escala aprox. 2 m. Figure 4.- Panoramic view of the Las Ilces Section. Dotted lines mark the boundaries between stratigraphic groups as seen at the field. Unit M corresponds to the lower massive limestone; M1, M2 and M3 are different masses into the main block. The well bedded limestones (T1 to T5) occurs towards NNW. The Unit T6 occurs above the well bedded units. The scale-person is about 2 m high. Figura 5.- Detalle de una colonia de Syringopóridos rodeando un coral solitario. Parte central del Tramo M. Figure 5.- Detail of a colony of Syringoporoids coloniz- ing a solitary coral. Middle part of unit M. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez mos, briozoos y poríferos. En el Anexo I se encuentran los histogramas de abundancia relativa de los componentes esqueléticos para cada una de las láminas. Algas calcáreas y cianobacterias: Las algas calcáreas son un componente esquelético fun- damental en la sección y el principal biocons- tructor en la mayoría de los niveles analizados. Se han reconocido algas verdes de la división Clorophycophyta, PAPENFUSS, 1946, pertene- cientes a los géneros Donezella MASLOV, 1929 (Fig. 7A); Goksuella GÜVEÇ, 1965, interpreta- do por MAMET (1991) como sinónimo de Donezella; Beresella (MAKHAEV, 1937) MASLOV & KULIK, 1956 y Uraloporella KORDE, 1950; Anthracoporella? PIA, 1920 (Fig. 7D). Así mismo se han encontrado algas rojas (Rodophycophyta, PAPENFUSS, 1946), de los géneros Ungdarella KORDE, 1951 (Fig. 7B); Komia KORDE, 1951; Petschoria KORDE, 1951; Stacheia BRADY, 1876 y Stacheoides CUMMINGS, 1955 (Fig. 8B) y Amorfia RÁCZ, 1964. Entre las cianobacterias se han identifi- cado los géneros Girvanella NICHOLSON & ETHERIDGE, 1878 y Ortonella GARWOOD, 1914. Por último, se han identificado géneros con afinidades inciertas cuyas actuales agrupa- ciones no se van a discutir en este trabajo y que se han incluido en este apartado por aseso- ramiento del Dr. Cózar. Los géneros identifi- cados son Asphaltina MAMET, 1972, Claracrusta VACHARD, 1981, Nostocites MASLOV, 1929 y Pokorninella VACHARD, 1991 (Fig. 7C). Cnidarios: Los cnidarios aparecen funda- mentalmente en los niveles masivos de la sec- ción (M y 6), mientras que en los niveles table- ados (T1-T5) se ha hallado algún fragmento aislado. Dentro de este filo se han identificado ejemplares pertenecientes a los órdenes Rugosa y Tabulata. Dentro del primero, se han identificado ejemplares de la Familia Bothrophyllidae como el género Caninostrotion EASTON, 1943 (Fig. 13A); Axophyllidae como el género Semenophyllum RODRÍGUEZ, 1984, y Geyerophyllidae como Kionophyllum CHI, 1931. Los ejemplares de tabulados corresponden a la Familia Syringoporidae (Fig. 8A). Foraminíferos bentónicos: Son una impor- tante fracción de los niveles estudiados, lle- gando incluso a ser el componente principal en alguno de ellos. Los foraminíferos identificados pertenecen a Fusulinata y Miliolata. Dentro de Fusulinata se han reconocido endotíridos y fusulínidos. Los géneros identificados dentro de los endo- tíridos son Diplosphaerina DERVILLE, 1952, Eotuberitina MIKLUKHO-MAKLAY, 1958, Tuberitina GALLOWAY & HARLTON, 1928 (Fig. 8A) e Insolentitheca VACHARD, 1979. De forma general, y debido a sus semejanzas mor- fológicas, se denominará a Diplosphaerina, Eotuberitina y Tuberitina como calcisferas s.l., para el presente trabajo. La clasificación del género Calcisphaera WILLIAMSON, 1880, se encuentra en controversia actualmente; hay autores que lo han considerado como quistes de algas, y otros los suponen pertenecientes a los endotíridos, lo que ha llevado a clasificar- lo como “incertae sedis”. En este estudio se incluirá este género dentro del grupo calcisfe- ra s.l. Así mismo se han identificado los géne- ros Biseriella MAMET, 1974, Globivalvulina SCHUBERT, 1921, Bradyiina VON MÖLLER, 1878 (Fig. 9D), Tetrataxis EHRENBERG, 1854, Calcitornella CUSHMAN & WALTERS, 1928, Paleonubecularia REITLINGER, 1950, Endothyra PHILLIPS, 1846, Planoendothyra REITLINGER, 1959, Asteroarchediscus MIKLUKHO-MAKLAY, 1956, Palaeotextularia SCHUBERT, 1921, Climacammina BRADY, 1873, Cribostomum VON MÖLLER, 1879 y Eolasiodiscus REITLINGER, 1956. Dentro de los fusulínidos se han identifica- do los géneros Eostaffella RAUSER- CHERNOUSOVA, 1948, Millerella THOMPSON, 1942, Ozawainella THOMPSON, 1935 (Fig. 9B), Pseudostaffella THOMPSON, 1942 (Fig. 10C), Plectostaffella REITLINGER, 1971, ISSN: 1132-1660 67 Figura. 6.- Esquema de situación de los puntos de mues- tro en las estructura dómica del Tramo M. Suprayacente a esta estructura se pueden observar los Tramos 1 y 2. Figure. 6.-Sketch of the samples distribution in the unit M. Units 1 and 2 lie on Unit M. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez Profusulinella RAUSER-CHERNOUSOVA & BELJAEV, 1936 (Fig. 9A) y Endospiroplectammina LIPINA, 1970. Dentro de los Miliolata se ha identificado Calcitornella CUSHMAN & WALTERS, 1928. Poríferos: Dentro de este filo se han reco- nocido diferentes morfologías, algunas de ellas inidentificables a causa de su estado de preservación. Dentro de la Clase Demospongiae se han identificado Tabulospongidae del género Chaetetes FISCHER VON WALDHEIM, 1830 (Fig. 9B). También se han identificado dentro de esta clase restos pertenecientes a la familia Sebargasiidae de tipo Cystauletes. Moluscos: Son componentes muy abun- dantes en algunos niveles de la sección de Las Ilces (ver histogramas IL/6(8) de la MF-3 del Anexo I). Principalmente se han reconocido ejemplares de bivalvos y gasterópodos, estos últimos principalmente de concha fina, muy ornamentados y con espinas. Braquiópodos: Forman una fracción mino- ritaria en las láminas y se han encontrado pocos ejemplares completos. Equinodermos: No son abundantes en la sección y forman una pequeña fracción dentro de los componentes esqueléticos. Se han reco- nocido principalmente placas y radiolas de equinoideos y placas de crinoideos. Briozoos: Los briozoos identificados no superan el 8% del total de los componentes. Se encuentran fragmentos de colonias y en oca- siones sólo es posible su identificación por medio de su microestructura. Ostrácodos: Se han hallado formas grandes y lisas, características del Paleozoico, y en la mayoría de los casos con su microestructura bien preservada. En algunos niveles forman parte de las fracciones más abundantes (ver histogramas IL/4 de la MF-7 del Anexo I), pero de forma general son un componente minoritario a lo largo de la sección. Componentes no esqueléticos La mayoría de las muestras presentan un predominio de la matriz frente a los compo- nentes esqueléticos. Destaca la abundancia de muestras con texturas micríticas (wackesto- ISSN: 1132-166068 Figura 7.- A.- Fragmentos de ramificaciones de Donezella lunaensis (Do). B.- Ramificación de un ejemplar de Ungdarella (Un). C.- Detalle de una masa de Pokorninella (Po). D.- Ramificación de Anthracoporella? (An). Figure 7.- A.- Branch fragments of Donezella lunaensis (Do). B.- Branch of Ungdarella (Un). C.- Detail of a mass of Pokorninella (Po). D.- Branch of Anthracoporella? (An). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-1660 69 Figura 8.- A.- Colonia de syringopóridos (Sy), tubos calcáreos de anélidos (Ta) y bioturbaciones de Thartharella (Th) creciendo en la muralla de un coral rugoso (Cr). Nótese los desarrollos de Tubertina (Tu) en una cavidad con textura micropeloidal entre el bafflestone generado por los syringopóridos y el coral rugoso. B.- Encostramiento de un chaeté- tido (Ch) por Stacheoides (St), nótese el desarrollo de microdolomita por neomorfismo en la parte inferior derecha de la imagen. Figure 8.- A.- Syringoporoid colony (Sy), anelid tubes (Ta) and Thartharella bioturbation(Th), growing on the wall of a rugose coral (Cr). Note the presence of Tubertina (Tu) in a cavity with micropelloidal texture. B.- Stacheoides (St) crust on a Chaetetid (Ch). Note the development of neomorphic microdolomite in the lower right part of the picture. Figura 9.- Varios ejemplares de foraminíferos frecuentes en la sección de Las Ilces. A.- Profusulinella. B.- Ozawainella. C.- Pseudostafella. D.- Bradyina. Figure 9.- Common foraminifers in Las Ilces Section. A.- Profusulinella. B.- Ozawainella. C.- Pseudostafella. D.- Bradyina. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ne/mudstone, wackestone, wackestone/packs- tone y packstone) aunque también se encuen- tran ejemplos de muestras bioconstruidas donde dominan los componentes esqueléticos frente a la matriz. En el estudio textural se han identificado tres tipos de matriz; micrítica, microesparítica y dolomicrítica. Dentro de la matriz micrítica se han dife- renciado, aplicando los criterios propuestos por FLÜGEL (2004), dos tipos; alomicrita, generada por decantación en el fondo marino. Aparece rellenando la porosidad intrapartícula de corales y poríferos, como la porosidad interpartícula producida por el bafflestone de algunos bioconstructores. Es común encontrar restos, o fragmentos de bioclastos de pequeño tamaño formando parte de esta matriz y en muestras bioconstruidas presenta un color negro intenso y desarrollos de pirita. En algu- nos casos la alomicrita se encuentra parcial o totalmente neomorfizada o dolomitizada, for- mando microesparita y dolomicrita. Por otro lado, encontramos automicrita, que aparece principalmente tapizando las paredes de algas y corales y posee un tamaño de grano menor que la alomicrita. Según FLÜGEL (2004) ésta se puede formar de mane- ra inorgánica por precipitación directa, o estar inducida o controlada biológicamente. En las muestras no se han encontrado criterios para establecer si se ha formado de manera induci- da o por el atrape de la micrita por parte de organismos, aunque es frecuente reconocerla junto a micropeloides, lo que sugiere un posi- ble origen microbiano. No se ha encontrado neomorfismo, ni dolomitización asociada. Hay abundantes componentes no esqueléticos, entre los que destacan; intraclas- tos, peloides y micropeloides. Los intraclastos, principalmente micríticos, muestran un tamaño variable entre 0,2 a 2 mm y poseen diferentes composicio- nes. Por un lado, abundan los intraclastos for- mados por micrita y pequeños fragmentos bio- clásticos, que presentan una textura similar a la alomicrita. Éstos muestran grados de esferi- cidad que varían entre las distintas muestras, oscilando entre redondeados a angulosos. Por otra parte, aparecen intraclastos bien redonde- ados, formados por micrita limpia, con abun- dantes fragmentos de algas en su interior de tipo Donezella. Son los intraclastos de mayor tamaño y en ocasiones presentan colonizacio- nes de algas del tipo Claracrusta. Por último, destacan los intraclastos negros, opacos, bien redondeados, con abundantes calcisferas s.l., que aparecen en algunas muestras del Tramo 4. Los peloides aparecen de manera continua a lo largo de la sección, llegando a ser, en alguna muestra, un componente importante superando el 18% del total de la roca. Aparecen bien redondeados, muestran una forma ovoide y no superan las 100 μm. Los micropeloides se encuentran asociados a automicrita, rellenando cavidades parcial- mente cementadas, asociadas a cementos micríticos, o alrededor de burrows. Por último, destaca la frecuente aparición de icnofósiles a lo largo de toda la sección. Se han reconocido burrows con dos morfologías predominantes. Por un lado, cavidades con secciones circulares a elípticas, sin pared aglu- tinada, rellenas de matriz micrítica bioturbada, en la cual es frecuente reconocer texturas con- céntricas formadas por fragmentos de bioclas- tos orientados, aunque, en ocasiones, la matriz que rellena la bioturbación difiere ligeramente de la matriz general de la muestra. Por otro lado se han reconocido tubos de sección longitudinal cilíndrica y sección trans- versal circular, que presentan una pared aglu- tinada y cementada de micrita, asociada en ocasiones a micropeloides. Las cavidades pue- den estar rellenas por matriz o cementados por calcita en mosaico drusy, o micrita micrope- loidal. Actualmente hay cierta controversia a la hora de denominar estos icnofóslies; Thartharella ELLIOTT, 1980 (ver SAMANKASSOU, 2001; DELLA PORTA et al., 2002a), Terebella LINNAEUS, 1767 (ver WARNKE, 1995; FLÜGEL, 2004) o Prethocoprolitus ELLIOTT, 1962 (ver DEVOLVÉ et al., 1994). En principio este tipo de restos fueron descritos como coprolitos de anélidos, lo que llevó a denominarlos como Prethocoprolitus (ELLIOTT, 1962) y es frecuen- te encontrarlos asociados a Tubiphites (DEVOLVÉ op. cit.) en rocas del Jurásico. Posteriormente, y por similitud, algunos auto- res lo asignan como Terebella (CHAFIKI et al., 2004 y OLIVIER et al., 2008) que hace referen- cia a un tubo de pared aglutinada formada por un gusano poliqueto actual. ELLIOTT (1980) revisa la clasificación de Prethocoprolithus y ISSN: 1132-166070Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez asigna la especie P. cucumeriformis ELLIOTT, 1962 a un nuevo género, Thartharella, dife- renciando así, la estructura fecal, del tubo con pared aglutinada con peloides. En este trabajo se denominará a este tipo de bioturbaciones como Thartharella (Fig. 10A), como en el caso del sinclinal de Cármenes, dentro de la Zona Cantábrica (SAMANKASSOU, op. cit), ya que poseen una estructura similar a la descrita por ELLIOTT (op. cit). Estas bioturbaciones llegan a ser muy abundantes dentro de la fracción no esqueléti- ca en algunos niveles de la sección. A su vez se han identificado restos de tubos calcáreos de anélidos de origen incierto (Fig. 10B). ANÁLISIS DE LAS MICROFACIES Para el análisis de las microfacies se han estudiado un total de 68 láminas delgadas. La caracterización de las diferentes microfacies se ha realizado atendiendo a su fábrica y tex- tura deposicional, contenido paleontológico y elementos diagenéticos característicos. Para la discriminación e identificación de las mismas se ha realizado una serie de histogramas de frecuencia de componentes esqueléticos (ANEXO) en los cuales se han representado las siguientes categorías taxonómicas: Algospongias (Al), donde se incluyen las ung- darelláceas, aoujgálidos, cianobacterias, algas encostrantes y Pokorninella; Braquiópodos (Br); Calcisferas s.l. (Ca); Corales (Co), que incluye los corales rugosos y syringopóridos; Equinodermos (Eq); Foraminíferos (Fo); Moluscos (Mo); Ostrácodos (Os); Paleosiphonocladales (Pa) que incluye a Donezella y las bereséllidas; Poríferos (Po) y la asociación Petschoria-Anthracoporella? (Pt+An). Se han reconocido un total de siete micro- facies, que se describen a continuación: MF-1: Wackestone bioclástico con peque- ñas masas de Donezella estabilizantes (Muestras IL/M7, IL/M7 e IL/M6). Se caracteriza por presentar texturas wac- kestone con bioclastos dispersos, siendo en algunas mudstone. La matriz está formada por alomicrita con un contenido subordinado de automicrita entre las ramificaciones de las colonias de Donezella. Hay presencia de burrows de Thartharella aislados, que no superan el 5% del total de la lámina. Como componente principal destacan las pequeñas masas de Donezella que no sobrepasan los 4 mm de alto y que no tienen una gran continui- dad lateral. Estas masas se encuentran com- puestas por Donezella lutugini MASLOV, 1929 (Fig. 11A). En algunas láminas son muy abun- dantes, llegando al 70% de los componentes esqueléticos (ver histogramas IL/M6 e IL/M7 de la MF-1 del Anexo) y presentan crecimien- tos tanto en la vertical como en la horizontal. Estas pequeñas masas se alternan con zonas de ISSN: 1132-1660 71 Figura 10.- A.- Bioperforaciones de Thartharella (Th), nótese la pared aglutinada micropeloidal, estas bioturbaciones se desarrollan alrededor de una serie de cavidades cementadas (Cc) y están asociadas a peloides (Pe) y fragmentos de Donezella (Do). Nótese los cristales euhedrales de pirita (Py). B.- Detalle de tubos calcáreos de anélidos de origen incierto (Ta) colonizando la muralla externa de un coral rugoso (Cr). Figure 10.- A.- Thartharella burrows (Th). Note the micropeloidal, aglutinated wall; These burrows occur around cemented cavities (Cc), they are associated to peloids (Pe) and Donezella fragments (Do). Note the euhedral crystals of pyrite (Py). B.- Detail of problematic annelid tubes (Ta) colonized the external wall of rugose coral . Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166072 acumulación de bioclastos dispersos y orienta- dos en posición de máxima estabilidad. Abundan los moluscos, hallándose gasterópo- dos ornamentados de gran tamaño (Fig.11B) y también es frecuente la aparición de Bradyina. De forma minoritaria aparecen braquiópodos, placas y radiolas de equinoideos, bereséllidos, fusulínidos, endotíridos, y calcisferas, como bioconstructores secundarios y accesorios. Se observa un alto grado de desarticula- ción, sobre todo en los moluscos, y una frag- mentación media a baja de los bioclastos. En ocasiones hay foraminíferos que presentan señales de fragmentación, pudiendo estar transportados. Los moluscos se encuentran principalmente fracturados por procesos de compactación. MF-2: Boundstone de organismos estabili- zadores y soportantes (Muestras IL/6(6), IL/6(21), IL/6(25), IL/6(30), IL/6(31), IL/6(47), IL/M1, IL/M2, IL/M3 e IL/M5). Caracterizada por texturas boundstone, con algunas zonas de removilización entre los bio- constructores (MF-5, véase más adelante). Esta microfacies presenta un aspecto muy des- organizado y una fábrica deposicional hetero- génea. La alomicrita es predominante y apare- ce rellenando la porosidad generada por los bafflestone. La matriz muestra una alta opaci- dad y desarrollo de pirita framboidal alrededor de los bioclastos en forma de encostramientos, llegando en algunas muestras al 3% del total de la lámina. Así mismo se observa automicri- ta asociada a micropeloides alrededor de cora- les, pero es minoritaria. En las muestras en las que el bioconstructor principal es Donezella abunda la automicrita frente a la alomicrita. Los peloides no superan el 10% y hay pre- sencia de cavidades cementadas, siendo abun- dantes los burrows de Thartharella (Fig.12B) alrededor de las mismas, aunque también se observan burrows sin pared aglutinada, que muestran ordenamiento interno de la matriz de relleno. Dentro de esta microfacies se produce una alternancia entre el tipo de bioconstrucción y el organismo bioconstructor, como se puede apreciar en los histogramas de la MF-2 del Anexo I. Por un lado destacan los bafflestone de organismos estabilizadores y soportantes, cuyos bioconstructores principales son Donezella, Beresella, syringopóridos (Fig.12A), corales rugosos, Ungdarella (Fig. 13A) y Komia. Así mismo también aparecen framestones de Chaetetes, masas de Donezella (Fig.12A) y bereselláceas que generan una cementación rápida y forman verdaderos armazones rígidos, sin automicrita y con una porosidad interpartícula menor. En algunas muestras aparecen variaciones entre ambos tipos, bafflestone/framestone, con combina- ciones de los bioconstructores principales. Como bioconstructores secundarios desta- can las algas rojas, algas verdes, briozoos, cal- cisferas, fusulínidos, endotíridos, miliolinos, braquiópodos, equinodermos, moluscos, cia- nobacterias y organismos de afinidades incier- tas. Esta microfacies se caracteriza por poseer una alta diversidad y una abundancia media, condicionada por la excesiva ocupación de los organismos bioconstructores. En ocasiones Figura 11.- A.- Detalle de una masa de Donezella (Do) entre dos niveles bioclásticos con texturas wackestone (parte inferior) y mudstone (parte superior), nótese el ejemplar de Bradyina (Ba), característico de esta microfacies. B.- Detalle de gasterópodos (Ga) también abundantes en esta microfacies. Figure 11.- A.- Detail of Donezella masses (Do) between two bioclastic layers with wackestone (down) and mudstone (up) textures. Note a specimen of Bradyina, common in this microfacies. B.- Detail of gastropods (Ga), also common in this microfacies. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-1660 73 hay una fragmentación elevada, encontrándo- se restos de corales, foraminíferos y masas de algas con roturas planas. En otros casos se observan orientaciones preferentes de los bio- clastos acumulados en zonas de removiliza- ción por encima de las zonas bioconstruidas. MF-3: Boundstone con intraclastos y peloides (Muestras IL/6(1), IL/6(3), IL/6(4), IL/6(7), IL/(8), IL/6(46), IL/6(48), IL/M8). Formada principalmente por texturas tipo boundstone de organismos estabilizadores. Es común el desarrollo de zonas más wackestone con abundantes bioclastos dispersos, intraclas- tos y peloides. La matriz es heterogénea y está formada principalmente por alomicrita sin contenido en materia orgánica. En la mayoría de las mues- tras hay abundantes micropeloides asociados a importantes desarrollos de automicrita alrede- dor de los bafflestones. Comparativamente, la abundancia de automicrita es mayor en esta microfacies. Se observa una abundancia relativa de intraclastos polimodales, que en algunos casos llegan a ser centimétricos y muestran distor- sión discontinua y plana en algunos de ellos. Los peloides también son polimodales, siendo en su mayoría menores de 50 µm. En ambos casos, tanto los peloides como los intraclastos no superan el 20% del total de la lámina, pre- sentando una media muy superior comparati- vamente al resto de las microfacies. Hay pre- sencia de Thartharella que llega hasta el 8% de la lámina y cabe resaltar la presencia, en algunos casos abundancia, de porosidad mól- dica rellena por cementos calcíticos en mosai- co drusy. En algunas muestras se han encontrado texturas micropeloidales ligadas a una posible génesis microbiana (Fig. 8A), sobre todo en cavidades y asociada a poríferos. Los bioconstructores principales son Petschoria (Fig. 13B), Anthracoporella?, demosponjas de tipo Cystauletes, que forman texturas bafflestone y en ocasiones framesto- ne-bafflestone de corales (Fig. 13A) y Chaetetes asociados, como se puede observar en los histogramas de la MF-3 en el Anexo I. Donezella es un bioconstructor minoritario en esta microfacies, pero puede aparecer, en alguna muestra, de forma dominante. Las fau- nas que acompañan esta microfacies están for- madas por placas y radiolas de equinoideos, moluscos, ostrácodos, endotíridos, fusuliníni- dos, algas rojas, aoujgálidos, calcisferas, cia- nobacterias y organismos de afinidades incier- tas como Asphaltina. La abundancia de organismos es relativa- mente alta, siendo en alguna muestra algo más baja que la media para esta microfacies. La fragmentación y la desarticulación es elevada, llegando incluso a rotar talos de Petschoria lo que genera criterios de geopetalidad inversos. En ocasiones aparecen muestras con mez- cla entre las microfacies MF-2 y MF-3 (Muestras IL/6(32) e IL/6(48)). Ambas mues- tras presentan fábricas deposicionales hetero- géneas, en las cuales se observan texturas Figura 12.- A.- Bafflestone/Framestone de Donezella (Do) junto con ejemplares de Ungdarella (Un). B.- Bafflestone de syringopóridos (Sy) con intercrecimientos de masas de Donezella (Do) encostramientos de Claracrusta (Cl) y desarro- llos de Thartharella (Th). Figure 12.- A.- Bafflestone/Framestone of Donezella (Do) with fragments of Ungdarella (Un). B- Bafflestone of syringo- poroids (Sy) with Donezella masses (Do), Claracrusta crusts (Cl) and Thartharella burrows (Th). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez boundstone de organismos soportantes como corales rugosos, syringopóridos y chaetétidos, y zonas con desarrollo de organismos estabili- zadores como Donezella. Algunas zonas pre- sentan características más wackestone/packs- tone con signos de removilización. Se pueden observar abundantes peloides, micropeloides, cavidades cementantes y desarrollos de auto- micrita atrapada entre las masas de Donezella durante el crecimiento de las masas algares. Se observa un menor contenido en alomicrita oscura y a su vez se distingue una pequeña fracción de micrita limpia con abundantes peloides y micropeloides. Estas facies de tran- sición tienen una mezcla de fósiles caracterís- ticos entre ambas microfacies. MF-4: Wackestone bioclástico (Muestra IL/1a). Caracterizada por texturas wackestone de bioclastos dispersos en una matriz casi exclu- sivamente formada por alomicrita. Hay pre- sencia de burrows, que muestran una ligera orientación oblicua y algún pequeño intraclas- to. Estas muestras presentan un alto grado de diagénesis lo que impide un buen reconoci- miento de los componentes esqueléticos, que generalmente se encuentran recristalizados a psedomicroesparita y presentan signos de neo- morfismo degradante, perdiendo, en muchos casos, su microestructura original. Está compuesta principalmente por algas encostrantes indeterminadas y fragmentos de bivalvos y moluscos indeterminados. Hay res- tos de masas de Donezella de formas globosas, rotadas y con signos de transporte. Presenta una alta abundancia de fusulínidos. De forma minoritaria se encuentran aoujgálidos indeter- minados con altas proporciones de pirita euhe- dral en su interior, endotíridos, braquiópodos, equinodermos, gasterópodos ornamentados y poríferos calcáreos indeterminados (Fig. 14A). Se observa una ligera clasificación de los componentes bioclásticos y en algunos puntos aparecen con un mayor grado de empaqueta- miento (clastosoportados). Se puede distinguir una ligera orientación oblicua de los compo- nentes. Las muestras presentan signos de elevada desarticulación y fragmentación de los com- ponentes esqueléticos, una selección modera- da a mala y diversidad alta. MF-5: Packstone de Donezella (Muestras IL/1b, IL/1c, IL/1d, IL/2a, IL/2b, IL/3a, IL/6(2) e IL/6(5)). Caracterizada por poseer una textura packstone formada principalmente por restos de masas de Donezella (Fig. 14B) y bioclastos dispersos. Predominan los componentes esqueléticos frente a la matriz, presentando en su mayoría automicrita cementando las masas algares y alomicrita entre los fragmentos de masas y burrows. Estos últimos son muy abundantes, llegando a ser la microfacies con mayor porcentaje de estos componentes. Estas muestras poseen un alto contenido en intraclastos, y algo menor en peloides y micro- peloides. Los intraclastos, en ocasiones, llegan ISSN: 1132-166074 Figura 13.- A.- Bafflestone de syringopóridos (Sy) colonizando un coral rugoso del género Caninostrotion (Cr). B.- Talos de Petschoria (Pt), que muestran criterios de geopetalidad inversos. Figure 13.- A.- Syringoporoid bafflestone (Sy) growing on a rugose coral of the genus Caninostrotion (Cr). B.- Petschoria (Pt) branches showing geopetal infillings. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez a superar el 15% del total de componentes de la lámina. En muestras procedentes del Tramo 6 se observan intraclastos formados por una matriz limpia, con abundantes peloides y micropeloides y en ocasiones grandes desarro- llos de organismos bioturbadores como Thartharella. Algunos de estos intraclastos son milimétricos alcanzándose tamaños supe- riores a los 2 mm y se encuentran colonizados por Claracrusta y Donezella. En las muestras procedentes de los Tramos 1, 2 y 3 los intra- clastos arrastran fragmentos de masas de algas y algas encostrantes indeterminadas y poseen abundantes peloides y micropeloides. La MF-5 se caracteriza por poseer una alta diversidad y una abundancia relativamente baja de todos los componentes salvo de las masas de Donezella y moluscos, entre los que destacan gasterópodos ornamentados y bival- vos. Así mismo presenta pequeñas capas de removilización o debris de zonas más eleva- das, orientación de las bioturbaciones y bio- clastos y una alta fragmentación y desarticula- ción de los componentes esqueléticos. Los componentes minoritarios son, beresé- llidos, endotíridos encostrantes, fusulínidos, calcisferas, algas rojas encostrantes y aoujgá- lidos, bioturbadores tipo Thartharella, equino- dermos, cianobacterias y organismos de afini- dades inciertas. MF-6: Packstone peloidal bioclástico (Muestras IL/3b, IL/3c, IL/3d, IL/5a e IL/M4V). Caracterizada por presentar una textura deposicional clastosoportada sin ordenamien- to interno (Fig. 15 A,B) y con una gran influencia peloidal. La micrita es principalmente alomicrita, aunque se observan diferentes texturas diage- néticas, en ocasiones tiene un mayor conteni- do en materia orgánica y en otras presenta un aspecto más limpio. La automicrita aparece asociada a fragmentos de masas de algas trans- portadas. También hay una gran proporción de intraclastos en algunas muestras, aunque no superan el 15% del total de los componentes. Los peloides poseen diversas procedencias, y grados de transporte diferentes, llegando en ocasiones a presentar una esfericidad baja, y contenidos en materia orgánica altísimos. Como particularidad, algunas muestras pre- sentan niveles inferiores al 8% de esparita. Los bioclastos fundamentalmente pertene- cen a restos de Donezella, moluscos (Fig. 15A), aoujgálidos, bereséllidos y en algún caso Syringopóridos. Como restos minorita- rios aparecen braquiópodos (Fig. 15B), endo- tíridos, fusulínidos, ostrácodos, calcisferas, equinodermos, algas rojas encostrantes y tubu- lares. La principal característica de estas mues- tras, aparte de su aspecto caótico y desordena- do, es su alto grado de fragmentación y desar- ticulación. Hay una gran concentración de organismos resedimentados, sobre todo fora- miníferos bentónicos, en los que se observan diferentes grados de alteración diagenética. En algunos se presenta una recristalización de su concha microgranular generada por neomor- fismo agradante con crecimiento esparítico. ISSN: 1132-1660 75 Figura 14.- A.- MF-4. Wackestone-packstone bioclástico con fusulínidos (Fu) entre los que se reconoce un ejemplar de Pseudostafella, algas encostrantes y poríferos indeterminados (Po). B.- Fragmentos de una masa de Donezella (Do) correspondiente a la MF-5, con restos de algas encostrantes (Ae). Figure 14.- A.- MF-4. Bioclastic wackestone-packstone with fusulinids (Fu) of the genus Pseudostafella, encrusting algae and porifera (Po) occur too. B.- Fragments of Donezella masses (Do) typical of microfacies MF-5, with rests of encrusting algae (Ae). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez En cambio, otros foraminíferos sólo presentan signos de recristalización en los cementos intrapartícula. Las muestras pertenecientes al Tramo 3, sí presentan orientación de bioclas- tos de gran tamaño (Fig. 15A, B). MF-7: Mudstone/wackestone de cal- cisferas y ostrácodos (Muestras IL/4H, IL/4V) Caracterizada por tener una textura wac- kestone en la cual la fracción micrítica ocupa un porcentaje muy alto (Fig. 16A, B), está for- mada fundamentalmente por alomicrita, abun- dancia alta de peloides e intraclastos, algunos de estos últimos presentan una elevada con- centración de calcisferas, y poseen un alto contenido en materia orgánica. Los componentes esqueléticos se encuen- tran repartidos de forma dispersa, llegando en algunos puntos a estar más concentrados. Esta microfacies se caracteriza por una alta concen- tración de calcisferas, endotíridos, ostrácodos y fragmentos de moluscos. Presenta una diver- sidad comparativamente más baja frente al resto de las microfacies estudiadas. De forma minoritaria también aparecen fragmentos de braquiópodos, cefalópodos, placas de equino- dermos y fusulínidos. Presenta una desarticu- lación alta y una fragmentación relativamente baja, comparativamente con otras microfacies. Hacia la parte superior presenta una ligera orientación horizontal de los componentes. CARACTERIZACIÓN DE LA BIOCONSTRUCCIÓN A lo largo de todo este estudio se ha deno- minado la bioconstrucción en sentido amplio, caracterizada por poseer tramos con microfa- cies boundstone (bafflestone y framestone - según EMBRY & KLOVAN, 1971) de morfología dómica y aspecto masivo en sus tramos bio- construidos. Utilizando los criterios propues- tos por RIDING (2002) para la caracterización de bioconstrucciones, se han representado en un diagrama MEC (Matriz, Esqueletos, Cavidades/Cementos) el cual que contiene las proporciones de matriz, incluyendo todos los componentes no esqueléticos (intraclastos, peloides, micropeloides, borings, burrows, minerales autigénicos y micrita), los elemen- tos esqueléticos (que no estén transportados) y los cementos (o cavidades cementadas). RIDING (2002) atendiendo a estos parámetros, el diagrama MEC se subdivide en cuatro cam- pos. Un campo destinado a los montículos (que incluye los mud mounds y los arrecifes microbianos aglutinados), que parten desde 0- 50% en M/C y 0-20% en M/S. Un segundo campo para los parches arrecifales que parte desde 20-50% en M/S y 0-50% en M/C. Otro gran campo de arrecifes tipo franja que inclu- ye desde 50-100% M/S y M/C. Por último, un gran campo de arrecifes cementados que com- prende de 0-50% de M/S y de 0-50% de M/C. En nuestro análisis se obtuvieron los siguientes porcentajes: M: 78,34%; E: 20,14%; C: 1,52%, que permitieron situar la bioconstrucción dentro del campo de los mon- tículos y muy próximo al campo de los par- ches arrecifales (Fig. 17). Esto es debido a la presencia de elementos esqueléticos soportan- tes que ocupan un gran volumen de la fracción ISSN: 1132-166076 Figura 15.- MF-6 Packstone bioclástico A.- Ejemplares de bivalvos (Bi) y fusulínidos (Fu) sobre una matriz bioclásti- ca sin ordenamiento. B.- Braquiópodos (Br). Figure 15.- MF-6 Bioclastic packstone. A.- Bivalves (Bi) and fusulinids (Fu) embedded in a bioclastic matriz. B.- Brachiopods (Br). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez esquelética de la bioconstrucción, como son los corales, los poríferos y las algas calcáreas. La forma dómica del Tramo inferior (M), así como sus dimensiones (32 m de largo y 10 m de alto) y pendientes, que rondan los 40º, lo asemejan a los propuestos por SAMANKASSOU (2001) para los montículos de la Fm San Emiliano del Pensilvánico del Sinclinal de Cármenes (Cordillera Cantábrica), aunque con un tamaño ligeramente mayor. DISCUSIÓN Tras la caracterización de la bioconstruc- ción y la identificación de cada una de las microfacies se procede a analizar su distribu- ción espacio-temporal. La asociación de fósiles presente en esta sección, así como sus características texturales y de fábrica, indican que estas microfacies se desarrollan sobre una plataforma media siem- pre por encima del nivel de base de tormentas y por debajo del nivel de base del oleaje. La MF-1 se caracteriza por ser un wackes- tone bioclástico con pequeñas masas de Donezella estabilizadoras. Se trata de las facies más profundas de la sección, donde las masas de Donezella, las cuales prefieren ambientes ligeramente profundos con baja agitación (DELLA PORTA, 2002b), formarían lentamente el sustrato base para la generación de un montículo (Fig. 18), con lo cual se puede definir esta microfacies como de base de mon- tículo. Sobre esta microfacies se produce el des- arrollo de un primer montículo, caracterizado por la presencia de MF-2, totalmente biocons- truida (boundstone de organismos estabiliza- dores y soportantes), ligeramente menos pro- fundo que la microfacies anterior, como marca la presencia de corales, chaetétidos y ungdare- lláceas. Esta microfacies se caracteriza por una influencia ocasional del oleaje (ligera agi- tación), que en ocasiones presenta niveles de alta energía que muestran aparición brusca y cese rápido, destruyendo parcialmente la bio- construcción (tormentas) y generando superfi- cies de removilización, donde no se produce la precipitación de esparita. Posteriormente a esos episodios, el montículo se recuperaría uti- lizando las capas de removilización como sus- trato. Esta microfacies es característica del núcleo del montículo (Fig. 18). En los momentos de máxima energía, las partes superiores del montículo se destruirían generado acumulaciones bioclásticas removi- lizadas, sin ordenamiento interno y con un alto contenido en elementos esqueléticos proce- dentes del núcleo de montículo. Estos eventos formarían la MF-6, en las zonas más someras y próximas al montículo, apareciendo de forma continua, a lo largo de la columna estra- tigráfica. Se pueden observar en los tramos tableados superiores (Tramos 3 y 5) y en la propia estructura del montículo (muestra IL/M4V), y son característicos de zonas de ISSN: 1132-1660 77 Figure 16.- MF-7 A.- Wackestone de calcisferas y ostrácodos. Aparecen restos recristalizados de fusulínidos, uno de ellos posiblemente atribuible al género Ozawaiella? Junto con dos secciones de ostrácodos y Diplosphaerina. B.- Wackestone de calcisferas. Nótese la gran acumulación de Diplosphaerina en el margen superior izquierdo. Figure 16.- MF-7 A.- Bioclastic wackestone with calcispheres and ostracods. Are recrystallized remains of fusulinidss, one of them possibly Ozawaiella? Along with two sections of ostracods and Diplosphaerina. B.- Bioclastic wackestone with calcispheres. Note the large accumulation of Diplosphaerina in the upper left. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez talud (o pendiente) del mismo (Fig. 18). Por otra parte, la MF-4 parece indicar zonas más distales de estos taludes, con sedi- mentación dispersa de restos bioclásticos variados, con ordenamiento interno, produci- do por decantación tranquila y cuya proceden- cia estaría más próxima a los primeros des- arrollos del montículo. Se observa un aumen- to del tamaño de grano hacia el techo de cada tramo en los niveles de talud. A medida que crece la estructura en la ver- tical y se forman estos depósitos laterales de talud, el montículo se expande en la horizon- tal, a partir del crecimiento de las masas de Donezella adyacentes, que son continuamente removilizados, formándose la MF-5. Por enci- ma de estos tramos se encuentra el Tramo 4, que posee unas características de facies prote- gidas, como indica su contenido paleontológi- co (calcisferas y ostrácodos) muy propias de un lagoon. Estas facies deben haberse desarro- llado en una región protegida dentro del mon- tículo (Fig. 18). Por encima de los niveles bien estratifica- dos, aparece una nueva bioconstrucción que se interpreta como un nuevo montículo (T-6), con los mismos desarrollos de microfacies (salvo MF-1) y caracterizada por la abundancia de MF-3, que se diferencia de MF-2 por un cam- bio en la asociación de fósiles. Esta microfa- cies también se interpreta como de núcleo de montículo (Fig. 18). Parece indicar una mayor somerización, ya que hay una alta producción de Girvanella y Ortonella, así como presencia de texturas micropeloidales, intraclastos, peloides, y criterios de removilización (frag- mentación de talos de Petschoria y removili- zación de borings). Esta somerización posible- mente se originó en un ambiente restringido y protegido, como marca el cambio de faunas, desarrollándose la asociación Petschoria- Anthracoporella?, que como puntualizó RÁCZ (1964) preferiría un ambiente de poca agita- ción. Aún así, la batimetría más somera de esta microfacies indica que se verían afectadas por eventos puntuales energéticos, que producirí- an las removilizaciones y la formación de grandes intraclastos. De esta forma se puede concluir que se han reconocido dos estructuras bioconstruidas que se corresponderían a montículos. Una estruc- tura basal que corresponde el Tramo M, carac- terizado por la presencia de las microfacies MF-1, MF-2 y de forma aislada MF-3. A medida que crece tanto en la vertical, como en la horizontal, se desarrolla la MF-5. En episo- dios de tormentas se originaría la destrucción parcial del montículo y la formación de MF-6 y, en zonas más distales, MF-4. En zonas más protegidas se desarrollarían las facies MF-7. Por encima de esta bioconstrucción y sus nive- les de flanco asociados se encuentra una nueva bioconstrucción más somera, más restringida, con un cambio en las faunas dominantes, seguramente protegida, aún estando afectada por eventos energéticos puntuales. La forma- ción de este nuevo montículo podría estar rela- cionada con un episodio de aumento de la sub- sidencia de la plataforma media, siempre por encima del nivel de base de tormentas y por debajo del nivel de base del oleaje. Las condiciones paleoclimáticas muestran que tanto durante el Bashkiriense, como a lo largo del Moscoviense, continúan las condi- ciones de Icehouse que había al final del Misisípico, con bruscos cambios de tempera- ISSN: 1132-166078 Figura 17.- Diagramas MEC modificados de RIDING (2002). El diagrama B muestra la posición que ocupa la biocons- trucción de la sección estudiada (triángulo pequeño). Figure 17.- MEC diagrams, modified from RIDING (2002). Diagram B shows the position of the bioconstructions from Las Ilces (small triangle). Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez tura entre las regiones polares y las ecuatoria- les, extendiendo las condiciones de enfria- miento a latitudes bajas. Durante este periodo las bioconstrucciones calcáreas se caracterizan por poseer un gran variedad de organismos bioconstructores: Chaetetes, bereselláceas (Beresella, Dvinella, Uraloporella), paleosifo- nocladales (Donezella), ungdarelláceas (Ungdarella/Komia) y por las primeras algas filoides (Archaeolithophyllum). WAHLMAN (2002) divide las bioconstrucciones principa- les de este periodo en tres grandes grupos (o bancos): bancos de Dvinella/Donezella (ya que las agrupa dentro de las bereselláceas), bioconstrucciones de Chaetetes y bancos de Komia. Dentro de esta distinción, los montícu- los estudiados, se corresponderían con bancos de Donezella. Según la paleobiogeografía para el Bashkiriense la zona Cantábrica estaría inclui- da dentro del Paleotethys, en un pequeño estrecho producido por el Orógeno Hercínico. Se han encontrado abundantes trabajos que describen asociaciones paleontológicas simi- lares a las del montículo de Las Ilces, para edades coetáneas. Por un lado cabe destacar los numerosos afloramientos de la Zona Cantábrica de bancos de Donezella. Los aflo- ramientos de la Sierra de Cuera (DELLA PORTA et al. 2002a; DELLA PORTA et al. 2002b y DELLA PORTA et al. 2003), de la Fm San Emiliano (RÁCZ, 1965 ; BOWMAN, 1979 y SAMANKASSOU, 2001); Fm Lois Ciguera (RÁCZ, 1965); de la Fm Valdeteja en el valle de Bernesga (RIDING, 1979), destacan también los montículos de Estados Unidos de esta edad en Oklahoma (CHOH et al., 2006); Idaho (GROVES, 1986); los afloramientos de platafor- mas carbonatadas en Texas (MAZZULLO, 1981, FREEMAN, 1964 y LAMBERT, 1986); Utah- Nevada (RICH, 1967, 1969) y Canadá (MAMET et al., 1979). Por otra parte, también se han reconocido este tipo de asociaciones en Kazakstán (ZEMPOLICH et al., 1999); en Tarim (China) (MAMET et al., 2005) y en Jiangsu (China) (ZHOU et al., 1986). CONCLUSIONES La sección de Las Ilces está formada por una sucesión de seis tramos calcáreos en los que destacan facies bioconstruidas de aspecto masivo en campo. En dichos tramos abundan las algas calcáreas, los corales, poríferos y foraminíferos bentónicos y cabe resaltar el aspecto lenticular de los tramos masivos. Se ha realizado el análisis de microfacies de dicha sección, atendiendo a los componen- tes esqueléticos como no esqueléticos, la fábrica, la textura deposicional y a sus elemen- tos diagenéticos característicos, con el fin de distinguir las microfacies características y de esta forma reconstruir la distribución espacio- temporal de las mismas. El estudio taxonómico muestra una gran variedad de algas calcáreas, entre las más fre- cuentes encontramos, Donezella, Beresella, Ungdarella, Komia, Petschoria y Anthracoporella?. Entre los corales cabe resal- tar el alto contenido de corales tabulados de la familia Syringoporidae y dentro de los rugosos destaca la presencia de Caninostrotion, ISSN: 1132-1660 79 Figura 18.- Reconstrucción de la distribución de microfacies en el montículo de Las Ilces. Figure 18 .- Reconstruction of the distribution of microfacies in the mound from Las Ilces. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166080 Semenophyllum y Kionophyllum. Por otro lado, es abundante el contenido en foraminífe- ros bentónicos destacando la asociación Bradyina, Tetrataxis, Globivalvulina, Profusulinella, Pseudostaffella y Ozawainella, característica en esta sección y una gran pre- sencia de calcisfera s.l. Se ha realizado un estudio de la frecuencia de aparición relativa de los componentes esqueléticos, con el fin de reconocer sus varia- ciones en las muestras estudiadas. Estas varia- ciones se han representado en histogramas, que han ayudado a la identificación de las microfacies. A partir de los porcentajes de los compo- nentes deposicionales se ha caracterizado el tipo de bioconstrucción, representando en un diagrama MEC los porcentajes de micrita, componentes esqueléticos y cementos/cavida- des. De esta manera se obtuvieron los siguien- tes porcentajes: M: 78,34%, E: 20,14%, C: 1,52%, con lo cual se pudo situar la biocons- trucción dentro del campo de los montículos y muy próximo al campo de los parches arreci- fales. Esto es debido a la gran representación de elementos esqueléticos soportantes que ocupan un alto volumen en la fracción esque- lética de la bioconstrucción, como son los corales, los poríferos y en menor medida las algas calcáreas. El estudio petrográfico, taxonómico y el análisis cuantitativo de los componentes han permitido reconocer un total de siete microfa- cies. Las microfacies identificadas son las siguientes: MF-1: Wackestone bioclástico con pequeñas masas de Donezella estabilizantes, MF-2: Boundstone de organismos estabiliza- dores y soportantes, MF-3: Boundstone/Packstone de intraclastos y peloi- des, MF-4: Wackestone/Packstone bioclástico, MF-5: Boundstone/Packstone de Donezella, MF-6: Packstone peloidal bioclástico, MF-7: Mudstone/wackestone de calcisferas y ostrá- codos. El estudio de las microfacies muestra un montículo primario (Tramo M, MF-1 y MF-2 y Tramo 4, MF-7 en zonas restringidas del montículo) que se desarrolla en las zonas más profundas de la sección, a partir de organismos colonizadores primarios (Donezella) que darán estabilidad a la estructura. El crecimien- to del montículo se produce siempre en la zona fótica, sobre una plataforma media. A medida que crece la estructura en la vertical, y las facies de núcleo se expanden (MF-5), la estructura va somerizando, sufriendo destruc- ciones parciales debido a tormentas, lo que produciría la formación de facies de talud (Tramos 1,3 y 5, MF-4 y MF-6). Durante el crecimiento en la vertical se produce un aumento de la subsidencia, lo que favorece la generación de una nueva estructura secunda- ria, más somera y protegida (como muestra el cambio de faunas característico de MF-3), afectada por breves episodios energéticos (Tramo 6, MF-2 y MF-3). Se han encontrado abundantes bioconstruc- ciones con asociaciones paleontológicas simi- lares a la sección de estudio en otras áreas geo- gráficas. Destacan los montículos Bashkirienses de la Cordillera Cantábrica, tanto por su asocia- ción paleontológica, como por sus biocons- tructores principales. También se han descrito bioconstrucciones similares en Norteamérica (Oklahoma, Texas, Idaho, Utah-Nevada y Canadá), China (Tarim y Jiangsu y Kazajstán. AGRADECIMIENTOS Se agradece la inestimable colaboración de Pedro Cózar Maldonado y Diego García Bellido de la Universidad Complutense de Madrid. Esta investigación se enmarca en el proyecto CGL2006-03085/BTE. Este estudio se ha beneficiado de los consejos y observa- ciones aportados por los Dres. Comas- Rengifo, Más Mayoral y Della Porta. BIBLIOGRAFÍA BOWMAN, M.B.J. 1979. The depositional environments of a limestone unit from the San Emiliano Formation (Namurian/ Westphalian), Cantabrian Mts., NW Spain. Sedimentary Geology, 29: 25-43. CHAFIKI, D., CANÉROT, J., SOUHEL, A., EL HARIRI, K.& TAJ EDDINE, K. 2004. The Sinemurian carbonate mud-mounds from central High Atlas (Morocco): stratigraphy, geometry, sedimentology and geody- namic patterns. Journal of African Earth Sciences, 39: 337-346. CHOH, S.J. & KIRKLAND, B.L. 2006. Sedimentologic role of Microproblematica Donezella in a Lower Pennsylvanian Donezella-Siliceous sponge-dominat- ed carbonate buildup, frontal Ouachita thrust belt, Oklahoma, USA. Journal of Sedimentary Research, 76: 152-161. DELLA PORTA, G., KENTER,J. A. M., IMMENHAUSER, A, & BAHAMONDE J.R. 2002a. Lithofacies character and architecture across a Pennsylvanian inner-platform Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez transect (Sierra de Cuera, Asturias, Spain). Journal of Sedimentary Research, 72(6): 898-916. DELLA PORTA, G; KENTER, J.A.M. & BAHAMONDE J.R. (2002b). Microfacies and Paleoenvironment of Donezella Accumulations across an Upper Carboniferous High-rising Carbonate Platform (Asturias, NW Spain). Facies, 46: 149-168. DELLA PORTA, G., KENTER, J.A.M., BAHAMONDE, J.R., IMMENHAUSER, A. & VILLA, E., 2003. Microbial boundstone dominated carbonate slope (Upper Carboniferous, N Spain): microfacies, lithofacies distribution and stratal geometry. Facies, 49: 175- 208. DEVOLVÉ, J.J., HANSOTTE, M. & VACHARD, D. 1994. Biostratigraphy by foraminífera and algae of the Carboniferous deposits (uppermost Viséan- Serpukhovian) of the Arize Massif (Ariége, France). Neues Jahrbuchfuer Geologie und Paleontologie. Abhandlungen. 192(2): 183-201. ELLIOT, G. F. 1962. More microproblematica from the Middle East. Micropaleontology, 8: 29-44. ELLIOTT, G.F. 1980. Revision of the microproblematicum Prethocoprolithus Elliot, 1962. Bulletin of British Museum. Natural History. Geology Series, 34(4): 251-254. EMBRY, A.F. & KLOVAN, J.E. 1971. A late Devonian reef tract on northeastern Banks Island, N.W.T. Bulletin of Canadian Petroleum Geology, 19(4): 705-724. FLÜGEL, E. 2004. Microfacies of carbonate rocks: analy- sis, interpretation and application. 976 pp. Springer. New York. FREEMAN, T. 1964. Algal Limestone of the Marble Falls Formation (Lower Pennsylvanian), Central Texas. The Geological Society of America bulletin, 75: 669- 676 GROVES, J.R. 1986. Calcareous algae and associated microfossils from Mid-Carboniferous rocks in east- central Idaho. Journal of Paleontology, 60: (2): 476- 496. LAMBERT, L.L. 1986. Growth habitat of the microprob- lematical genus l)onezella in the middle Magdalena, Hueco Mountains, West Texas. Geological Society of America. Abstracts with Programs, Section, 35th annual meeting; South-central Section, 20th annual meeting, Memphis: 250-251. MAAS, K. 1974. The geology of Liebana, Cantabrian Mountains, Spain; deposition and deformation in a flysch area. Leidse Geologische Mededelingen, 49(3): 379-465. MAMET, B. 1991. Carboniferous Calcareous Algae. En: RIDING, R. (ed.): Calcareous Algae and Stromatolites. pp. 370-451. Springer. Berlin. MAMET, B., NASSICHUK. W. & ROUX, A. 1979. Algues et stratigraphie du Paleozoique superieur del´ Arctique Canadien. Bulletin des Centres de Recherches Exploration-Production Elf-Aquitaine. 3(2): 669- 683. MAMET. B & ZHU. Z. 2005. Carboniferous and Permian algal microflora, Tarim Basin (China). Geologica Belgica, 8: 1-2, 3-13. MARTÍNEZ GARCÍA, E. 1981. El Paleozoico de la Zona Cantábrica Oriental (Noroeste de España). Trabajos de Geología, 11: 95-127. MAZZULLO S.J. 1981. Facies and burial diagenesis of a carbonate reservoir: Chapman Deep (Atoka) Field, Delaware Basin. Texas. American Association Petroleum Geologist Bulletin, 65(5):850-865. OLIVIER, N., PITTET, B., WENER, W., HANTZPERGUE, P. & GAILLAR, C. 2008. Facies distribution and coral- microbialite reef development on a low-energy car- bonate ramp (Chay Peninsula, Kimmeridgian, west- ern France). Sedimentary Geology, 205: 14-33. RÁCZ, L. 1964. Carboniferous calcareous algae and their associations in the San Emilian and Lois-Ciguera Formations (Prov. León NW Spain). Leidse Geologische Mededelingen, 31: 1-112. Rich, M. 1967. Donezella and Dvinella, widespread algae in lower and middle Pennsylvanian rocks in east-central Nevada and west-central Utah. Journal of Paleontology, 41(4): 973-980 RICH, M. 1969. Petrographic analysis of Atokan carbon- ate rocks in central and southern Great Basin. American Association of Petroleum Geologists, Bulletin, 53(2): 340-366. RIDING, R. 1979. Donezella bioherms in the Carboniferous of the Southern Cantabrian Mountains, Spain. Bulletin des Centres de Recherches Exploration-Production Elf-Aquitaine, 3, 2, 787-794. RIDING, R. 2002. Structure and composition of organic reefs and carbonate mud mounds: concepts and cate- gories. Earth-Science Reviews, 58: 163–231. RODRÍGUEZ, S. 1984. Corales rugosos del Carbonífero del este de Asturias. 528 pp. Tesis doctoral Facultad de CC. Geológicas de la Universidad Complutense de Madrid. Madrid. RODRÍGUEZ FERNÁNDEZ, L.R., HEREDIA, N. & NAVARRO, D. 1992. Hoja del Mapa Geológico de España E. 1/50.000 nº 81 (Potes). 2ª Serie MAGNA-Primera edición, ITGE. SÁNCHEZ DE LA TORRE, L., AGUEDA, J., COLMENERO, J.R. & GARCÍA-RAMOS, J.C. 1983. Evolución sedimenta- ria del Carbonífero superior en la zona de La Liébana (Cantabria). In: Congreso Nacional de Sedimentología; 10. OBRADOR, A. Eds. pp. 5.35- 5.37. Universidad Autónoma de Barcelona. Barcelona. SAMANKASSOU, E. 2001. Internal structure and deposi- tional environment of Late Carboniferous mounds from the San Emiliano Formation, Cárrmenes Syncline, Cantabrian Mountains, Northern Spain. Sedimentary Geology, 145: 235-252. WALHMAN, G.P. 2002. Upper Carboniferous – Lower Permian (Bashkirian-Kungarian) mounds and reefs. En: Phanerozoic reef patterns (Ed: W. Kiessling , E. Flügel y J. Golonka), SEPM special publication, 72: 271-338.WARNKE, K. (1995). Calcification Processes of Siliceous Sponges in Visean Limestones (Counties Sligo and Leitrim, Northwestern Ireland). Facies, 33: 215-227. WARNKE, K. 1995. Calcification Processes of Siliceous Sponges in Visean Limestones (Counties Sligo and Leitrim, Northwestern Ireland). Facies, 33: 215-227. ZEMPOLICH, W.G., COOK, H. E., ZHEMCHUZHNIKOV, V. G & ZORIN, A. Y. 1999. Stratigraphic architecture and diagenesis of middle to late Paleozoic reefs and mounds of the Bolshoi Karatau Mountains, Kazakstan and the Southern Urals, Russia; an exam- ISSN: 1132-1660 81 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166082 ple of biotic demise and recovery. Annual Meeting Expanded Abstracts - American Association of Petroleum Geologists,1999. 158 pp. ZHOU, Z.C. & FLÜGEL, E. 1986. Carbonate Ramp Deposition: Middle to Upper Carboniferous Microfacies of Eastern Anhui and Southern Jiangsu, China. Facies, 14: 201-234. Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez Manuscrito recibido el 28 de octubre de 2009 Manuscrito aceptado el 28 de enero de 2010 ISSN: 1132-1660 83 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ANEXO ISSN: 1132-166084Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-1660 85 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166086Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-1660 87 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166088Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132- 89 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez ISSN: 1132-166090Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-94 Análisis de microfacies de los montículos de Las Ilces Coronado & Rodríguez ISSN: 1132-1660 91 Coloquios de Paleontología 59 (2009): 61-91 Análisis de microfacies de los montículos de Las IlcesCoronado & Rodríguez