%0 Book %T Identidades Compartidas. Pintura Española en Portugal publisher Museo Nacional de Arte Antiga %D 2023 %@ 978‑972‑9258‑47‑3 %U https://hdl.handle.net/20.500.14352/102803 %X La presencia de pintura española en Portugal es consecuencia de las relaciones históricas y culturales que han existido entre dos países vecinos que han mantenido lazos históricos comunes muy estrechos en momentos claves de su historia. Esta presencia se concretó a través de acciones de coleccionismo, pero también de regalos diplomáticos, ejercicios de patrocinio eclesiástico, y en tiempos más recientes adquisiciones de museos e instituciones privadas y públicas.En ese contexto, es necesario subrayar especialmente los flujos artísticos, que permitieron a artistas españoles trabajar para mecenas portugueses como los retratistas de corte o en iglesias para cuya decoración se solicitaron obras suyas. Quizás, el caso más significativo es el de Luis de Morales, gracias al prestigio que su labor gozó en la denominada raya y ciudades colindantes. Este intercambio fue recíproco, favoreciendo que algunos pintores portugueses se formaran por vecindad en focos artísticos en los que existían evidentes estímulos, como es el caso de Sevilla, puerto y puerta de Indias. Tanto Vasco Pereira lusitano como Baltasar Gómez Figueira, padre de la también pintora Josefa de Óbidos, son los casos más palpables de ese entramado artístico que vinculó la ciudad hispalense con el contexto creativo portugués. La presente exposición se enmarca en los actos de la presidencia de España de la Unión Europea en el que colabora el Ministerio de Cultura de España conjuntamente con el Museo Nacional de Arte Antiga, y tiene como objetivo subrayar estos flujos mutuos, y al mismo tiempo explicar qué elementos comunes comparten la pintura española y la portuguesa con el propósito de presentar desde una óptica renovadora e integradora los resultados de las circulaciones artísticas, la globalización del arte y la configuración de las identidades artísticas. Por esta razón las obras seleccionadas y expuestas dialogarán con las de algunos artistas portugueses que desarrollaron parte de su actividad profesional en España o bien españoles que trabajaron para Portugal. Este proyecto pretende un fin más ambicioso y perdurable, gracias al impulso de una ambiciosa campaña de restauración, investigación y puesta en valor de pinturas españolas de cuyos resultados se esperan importantes novedades que constituyen un auténtico proyecto de investigación. El comisariado estará a cargo de Joaquim Caetano, director del Museo Nacional de Arte Antiga, y Benito Navarrete, catedrático de Historia del Arte de la Universidad Complutense de Madrid, y pretende convertirse en el primer estudio de referencia sobre la presencia de pintura española en Portugal, recorriendo un marco cronológico que abarca desde la Edad Media hasta el Romanticismo. El catálogo de la exposición constituye un ambicioso proyecto de estudio, redescubrimiento y revalorización de obras emblemáticas con aportaciones significativas para la pintura española que son testimonio de la historia compartida de ambos países en el marco del mundo ibérico. %~