García Barreno, PedroGuisasola Zulueta, María de la ConcepciónDulín Íñiguez, Elena2023-06-202023-06-202010-07-20978-84-693-4101-8https://hdl.handle.net/20.500.14352/47374La aterosclerosis, principal causa de enfermedad cardiovascular, constituye un complejo proceso inflamatorio crónico que se inicia con el daño celular a nivel del endotelio y termina con la formación de lesiones estratificadas en la pared arterial. En respuesta a agentes aterogénicos como hipercolesterolemia, hábito tabáquico, resistencia a la insulina, agentes infecciosos o hiperhomocisteinemia, el endotelio se activa expresando moléculas de adhesión en su superficie, incrementando su permeabilidad a lipoproteínas, sintetizando y secretando citoquinas. Como consecuencia, leucocitos mononucleares migran y se adhieren a la pared del vaso, acumulándose lipoproteínas en el espacio subendotelial, cuya oxidación contribuye al proceso inflamatorio por activación de macrófagos, que a su vez sintetizan citoquinas y factores de crecimiento que promueven la atracción de células musculares lisas, estimulando la angiogénesis. La adhesión plaquetaria a la superficie endotelial y la secreción de quimiocinas y factores de crecimiento contribuye a la migración de células musculares lisas desde la media a la íntima, estimulando la producción extracelular de proteinas de la matriz. La formación de la capa fibrosa que rodea el ateroma y la continua acumulación lipidica por macrófagos da lugar a la formación de células espumosas. Dependiendo del espesor de la capa fibrosa se producirá la ruptura, con la consiguiente exposición del core necrótico del ateroma a la sangre, agregación plaquetaria con trombosis y potencial infarto.spaEnfermedad cardiovascular, hiperhomocisteinemia y proteínas de choque térmicodoctoral thesisopen accessEnfermedad cardiovascularProteínasHiperhomocisteinemiaAterosclerosisBiología molecular (Química)Bioquímica (Química)