La crueldad de las imágenes. Estética y política del cine
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2022
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Guillermo Escolar
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La virtualización del mundo parece imponerse hoy en la sociedad de control neoliberal. En contraste con la resistencia iconoclasta del decenio del 68 y la iconofobia posmoderna, este libro iconófilo confía en la fuerza de la imagen cinematográfica para combatir la pérdida de realidad que se experimenta en un mundo dominado por el simulacro y por pseudoimágenes como las publicitarias. El resultado es una nueva estética cinematográfica de la crueldad, solo en parte inspirada por Artaud. Tal estética se funda, en primer lugar, en el reconocimiento de la precariedad de una imagen cuya realidad es invisible porque siempre está fuera del filme. Esto implica admitir la distancia insuperable entre la imagen y la vida, pero al mismo tiempo supone proclamar la potencia del montaje cinematográfico y de la mirada del espectador para «relacionar» la imagen con la realidad invisible y con la verdad. En segundo lugar, se basa en la sustitución de la estructura teológica-estética que adopta el modelo institucional del cine por una estética inorgánica y democrática que suprime toda jerarquía entre narrar y mostrar, entre documental y ficción, entre géneros o entre los diversos elementos del filme. Y, en tercer lugar, combate las patologías de la imagen contemporánea que el crítico Serge Daney englobó bajo el concepto de lo «visual».
En un tiempo como el nuestro, en el que triunfan películas y series que difuminan la diferencia entre las imágenes y los diversos simulacros que construyen una segunda realidad o hiperrealidad, resulta necesario un pensamiento estético que ayude a combatir la hegemonía de lo «visual». La estética de la crueldad exige una puesta en escena y un montaje que favorezcan la aparición de un nuevo espectador, capaz de realizar la tarea crítica –y política– de juzgar y discriminar entre las imágenes con referencia en el mundo y las imágenes «idólatras» o abyectas sin sustrato real. En la medida que se pueda promover prácticas artísticas de este tipo, seguirá siendo posible «confiar» en la imagen.