Nos han hecho tribunal y tenemos que constituirnos

Abstract

Siendo nosotras muy ponedoras (o sea, muy de hacer ponencias), tras investigaciones de largo aliento, nos vemos sometidas a la vida del tribunal y eso nos descentra, nos descontrola, nos aturde. Nos deja en la intemperie. Tú estás tan tranquila con tus lecturas, tus escrituras, tus cositas y tralará, cuando, de repente, te llega el email fatídico y la atmósfera se enrarece: “eres miembra de un tribunal equis junto con otro grupo de colegas equis para juzgar a equis”. ¡Ay, hijuca!, ha llegado el momento de las defensas, valoraciones, ponderaciones, evaluaciones, resoluciones… Ese mundo académico “en primera instancia” nos deja con el ambiente un poco tenso y eléctrico. Pero nosotras, a base de sopitas nos vamos haciendo el cuerpo para salir del marrón y dorarnos un poco.